He sido testigo de la evolución de Kutxo en diversos ámbitos entre los que destaco un proceso formativo gestáltico y otro de corte psicoterapéutico Integrativo psico espiritual (Programa SAT, creado por el Dr. Claudio Naranjo). Desde la lucidez que aporta el paso del tiempo resulta esencial la búsqueda personal. Y es en este sentido donde he podido ver a Kutxo implicado en su búsqueda con todo lo que conlleva: compromiso, voluntad, implicación a raudales y coraje para atravesar la «noche oscura» del alma como parte del proceso para poder purificar aquello que resulta necesario y reencontrarnos con lo esencial de nuestra vida. He sido testigo de su deconstrucción y su reconstrucción observando su valentía para expresar con honestidad lo propio y las experiencias en los encuentros e interacciones. Desde el símbolo del sanador herido, he podido atestiguar su evolución y la manifestación de valores como la empatía, la transparencia, el coraje para expresar, comunicar y ser.